Existe la falta creencia que si la presentas la declaración de la renta un año, el contribuyente tiene la obligación de presentarla de forma obligatoria todos los años.

Es un rumor que es totalmente falso, ya que la obligación de presentar la renta existe si superas los límites de ingresos que haces que estés obligado a presentar la declaración, o bien hay algún hecho que te obligue a hacerla como la venta de alguna propiedad o la venta de acciones, por ejemplo, en estos casos sí estas obligada a hacer la renta, pero no por el hecho de haberla presentado en el ejercicio anterior.

En el caso de matrimonios, surge muchas veces la duda si es mejor tributar y presentar la renta de manera conjunta o por separado.

Normalmente cuando los dos miembros del matrimonio trabajan, suele ser más favorable y más ventajoso presentar las declaraciones de manera individual, porque se suman las bases de ingresos de cada uno a la base general de la declaración, y esto hace que la base de referencia para el cálculo del IRPF sea mayor, por lo que el tramo de tributación del IRPF también es mayor, lo que implica que el resultado de la renta sea menos ventajoso que si se presenta de manera individual.

Lo que sí hay que tener en cuenta, es que si existe factores que están al 50%, como puede ser la deducción de hipoteca, sí tenemos que tener en cuenta ese porcentaje para aplicar la mitad de los pagos hipotecarios para cada contribuyente.

Aquellos contribuyentes que reciben rentas del extranjero, bien por alguna pension de jubilación o bien por otras cuestiones, sí están obligados a añadir esos ingresos extraordinarios como rendimientos del trabajo.

Esas prestaciones que reciben, se añadirán a sus rendimientos del trabajo o bien de ingresos pasivos, lo que hace que la base de la declaración suba. Lo malo es que al no tener retención alguna en el país de procedencia de la renta, suele conllevar que ante la subida de la base de cálculo del IRPF implica que la renta suele salir a pagar, ya que las pensiones que reciben tiene la retención necesaria que se aplica para ese tramo de renta, y al subir de tramo también sube el porcentaje a pagar.

Para la renta del ejercicio 2023, el plazo de presentación empieza el 3 de Abril de 2024 y el último día para su presentación es el 1 de julio. Desde Asesorania no recomendamos hacer la renta en los primeros día, porque el programa de presentación está colapsado y a veces puede haber algún error en la presentación de la declaración al quedarse “colgado” la propia web de la agencia tributaria.

Están obligados a presentar la declaración aquellos contribuyentes que reciban más de 22.000 euros brutos con carácter general. Ese límite disminuye hasta los 15.000 euros cuando los rendimientos de trabajo procedan de más de un pagador, a no ser que los ingresos del 2º pagador y posterior no superen los 1.500 euros que implica que la base suba hasta los 22.000 euros.
El límite pasa a 1.600 euros en el caso de rendimientos del capital mobiliario y de ganancias patrimoniales, siempre que dichos rendimientos hayan tenido retención.
Debido a que muchas veces tenemos dudas y los límites pueden estar cerca, os aconsejamos que os asesoréis bien antes de hacer o no hacer la declaración.
Uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta, para aplicar todas las deducciones fiscales en renta, serían las deducciones autonómicas, que dependen del domicilio fiscal del declarante o sujeto pasivo. En el caso de la Región de Murcia, las deducciones se clasifican en 4 grupos:

1. Las deducciones por circunstancias personales y familiares, como pueden ser los gastos de guardería o por conciliación entre otras.
2. Las deducciones autonómicas relativas a la vivienda habitual como pueden ser por inversión en instalaciones de recursos energéticos renovables (placas solares) o arrendamiento en vivienda habitual.
3. Otras deducciones serian las que tienen su origen en los donativos y donaciones, como los donativos para la investigación biosanitaria.
4. y por último las deducciones por otros conceptos, como serían las de mujeres trabajadoras o por los gastos de adquisición en material escolar y libros de texto.

Desde Asesorania siempre aconsejemos que revises tu declaración y veas cual es el resultado de la misma. Si el resultado de la declaración es a devolver lo normal es que la presentes, ya que aunque no estés obligado a presentarla, si te devuelven las retenciones soportadas nunca viene mal el ingreso que pueda suponer la devolución de la renta, y además la tienes presentada para cualquier acto administrativo o financiero que pudieras necesitar.

En el caso de no presentarla estando obligado como contribuyente, la agencia tributaria de oficio suele mandar un requerimiento a tu domicilio fiscal, indicando que no has presentado la renta y que según los datos que tiene en su poder estás obligado a presentarla. En este caso, tendrás que presentar la declaración fuera de plazo, lo que supone que la Agencia tributaria te puede sancionar por no presentar la renta en plazo y además de pagar la cuantía de la renta, también te puede exigir los intereses legales del tiempo transcurrido entre la presentación de la renta no presentado en su momento, hasta el pago de la misma.

Por eso siempre aconsejamos que si tienes dudas sobre tu declaración nos preguntes antes de que pueda tener consecuencias económicas más perjudiciales que no presentarla a tiempo.